La mayoría de las personas, o por lo menos una parte importante de ellas no hacemos aquello que nos gusta o que queremos, sino lo que nos conviene, por eso he decidido hablar hoy sobre este tema.
Desde mi punto de vista, existen múltiples razones por lo que generalmente hacemos lo que nos conviene y no lo que deseamos.
En primer lugar, creo se debe a que el ser humano simplemente por naturaleza es un ser egoísta, es decir, que no mira por los demás, tan solo mira por su bien y su beneficio. Unos más y otros menos pero existen numerosas circunstancia en la que cualquiera de nosotros haya echo aquello que le conviene a él mismo pensando sólo en lo que puede obtener de ello y no mirando también por el bien de los que están a nuestro alrededor.
En segundo lugar, también pienso que hacemos lo que nos conviene y no lo que queremos porque no queremos equivocarnos, por miedo a fallar y a cometer un error; aunque por otro lado yo soy de esas personas que creen que cuando hacemos lo que nos conviene en lugar de hacer aquello que realmente queremos hacer estamos cometiendo un error irreparable, el peor de los errores que podemos perpetrar. Además, no deberíamos hacer lo que nos conviene por miedo a equivocarnos ya que somos seres humanos y todo ser humano se equivoca y tiene derecho a rectificar su propio error, e incluso a aprender de él.
En tercer lugar, creo que actuamos así porque siempre creemos que es mejor aquello que se supone que nos conviene que lo que realmente queremos, normalmente suele ser mejor lo que nos conviene que lo que queremos pero no siempre es así. Además, yo pienso que porque lo que nos conviene sea mejor que lo que queremos no debemos hacer lo que creemos que puede ser mejor para nosotros porque creo que debemos intentar hacer lo que queremos porque lo que realmente nos puede hacer feliz es lo que queremos no lo que nos conviene.
Finalmente, pienso que en muchas ocasiones hacemos lo que nos conviene porque por mucho que queramos hacer lo que deseamos creemos que eso que queremos es imposible, es decir, nos vemos incapaces de conseguir lo que queremos y actuamos de forma sencilla haciendo lo que nos conviene porque además de que nos conviene es más fácil de alcanzar que lo que queremos.
Por otro lado, habrá personas que piensen que lo que nos conviene es lo que queremos, pero yo creo que no siempre es así. Por ejemplo, casi todos los adolescentes estudiamos porque es lo que nos conviene para nuestro futuro, para poder estudiar y tener un buen trabajo, pero eso no es lo que realmente queremos.
También, podemos pensar que hacemos lo que queremos y no lo que nos conviene, pero desde mi punto de vista creo que esto no es cierto porque siempre dentro de aquello que que queremos buscamos en mayor o en menor medida lo que nos conviene. Por ejemplo, un jugador de fútbol hace su trabajo porque le gusta y porque jugar al fútbol es lo que realmente quiere, pero además le saca partido a su trabajo porque gracias a él obtiene un buen salario.
En conclusión, creo que existen diversas razones por las que actuamos así, principalmente porque somos egoístas y solo miramos por nuestro bien, también por miedo a equivocarnos y porque normalmente pensamos que lo que nos conviene es mejor para nosotros que lo que realmente queremos, e incluso porque creemos que lo que queremos es una meta inalcanzable. Desde mi punto de vista, esta forma de actuar es un gran error porque creo que ya que somos libre debemos hacer, siempre dentro de unos límites, lo que queremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario